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 En resumidas palabras:

La rinitis es una inflamación del revestimiento mucoso de la nariz, caracterizada clínicamente por uno o más síntomas: rinorrea, estornudo, prurito (picor) nasal, congestión nasal, drenaje (secreción) postnasal.

Si el médico explora el interior de las fosas nasales podrá observar que la mucosa de los cornetes está enrojecida, inflamada o con una coloración violácea muy característica.

El paciente suele presentar, además, los ojos congestionados, que escuecen y lagrimean con profusión. Puesto que toda la mucosa de la nariz está congestionada, el paciente no puede respirar libremente y con facilidad, por lo que no es de extrañar que la mucosa de los senos maxilares y frontales esté también congestionada. Ello podrá favorecer las sinusitis, afecciones muy habituales en estos pacientes, que les provocan frecuentes dolores de cabeza, malestar general y, dependiendo de la persona, cambios de carácter e irritabilidad.

La rinitis se manifiesta también con estornudos frecuentes, flujo nasal transparente, acuoso y lagrimeo constante todos estos síntomas sobre todo en las mañanas, esto hace que disminuyan las actividades diarias de las personas provocando malestares, comúnmente confundidos con un resfriado simple, a diferencia que un resfriado viene acompañado de fiebre y temperaturas y no va más allá de una o dos semanas.

FUENTE: WIKIPEDIA

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